Sólo 30 abogados asesores tiene la Comisión de atención a víctimas; debe haber uno por cada sala penal y agencia del ministerio público

Guanajuato, Gto., 6 de marzo de 2024.- Para que la Comisión estatal de atención a víctimas del delito desarrolle mejor sus funciones, es necesario que por lo menos haya un asesor sobre esa materia en cada una de las salas penales y en las agencias del ministerio público que existen en el estado.

Así lo afirmó el titular de ese organismo, Sergio Jaime Rochín del Rincón.

“Aquí ha habido necesidad de fortalecer la asesoría jurídica porque hoy por hoy nos toca toda la representación de todas las personas víctimas de delitos en el ámbito local, en el estado. En teoría, según la ley de la materia debería haber un asesor jurídico victimal en cada sala penal del Poder Judicial del Estado, así como en cada agencia del ministerio público”.

El número de abogados que tiene la institución es de 30, los cuales no tienen la capacidad para atender las necesidades de los juicios, ya que en cada uno de ellos se requiere de un asesor de víctimas.

Hasta hace un año la Fiscalía General del Estado atendía esos servicios, pero por reformas a la ley de la materia ahora le corresponde la Comisión estatal de atención a víctimas, por lo que ha solicitado el apoyo del gobierno del estado para que destine más recursos económicos con el fin de contratar a más abogados.

“Es un tema que hemos platicado el secretario de gobierno y el de finanzas, ya que es urgente fortalecer a los asesores jurídicos y hay muy buena respuesta de ambos secretarios en buscar la manera en que se pueda fortalecer a la asesoría jurídica además…con equipo”.

Subrayó que la carga de trabajo es excesiva porque se atiende a víctimas de toda clase de delitos

“No sólo los de alto impacto, que son los que originalmente podríamos pensar acá, sino todo tipo de delito, incluyendo fraudes y otros más”.

Por la falta de personal, los asesores de la Comisión se centran en los delitos relacionados con la desaparición de personas, homicidios, daños materiales y de índole sexual.