Necesario acelerar el combate contra el tabaquismo
CDMX 30 de junio de 2023.- México ha retomado las mejores prácticas y la integralidad de las medidas contra el tabaquismo con la reciente reforma a la Ley General de Control del Tabaco; ahora es necesario avanzar en acciones como el empaquetado neutro, prohibición de saborizantes, firma del Protocolo de Comercio Ilícito para ser sustentable a través del tiempo y alcanzar la meta de reducción de la prevalencia a menos de 10 por ciento para el año 2030.
Refiere lo anterior el estudio Consumo de tabaco y uso de cigarro electrónico en adolescentes y adultos mexicanos, que se publicó como parte de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut), realizada por el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) de la Secretaría de Salud.
Los resultados de la investigación precisan que es fundamental acelerar la implementación completa del Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el Control del Tabaco (CMCT) y continuar la evaluación de políticas de control, con el propósito de disminuir la carga económica y en salud, así como la mortalidad prematura que ocasiona el tabaquismo.
Datos del estudio muestran que 4.6 por ciento de adolescentes y 19.5 por ciento de personas adultas en México reportaron fumar en 2022, lo que representa cerca de un millón de adolescentes y 16.6 millones de adultos fumadores.
Por sexo, 6.7 por ciento de hombres y 2.5 por ciento de mujeres adolescentes fuma. Además, 3.7 por ciento de quienes tienen entre 12 y 18 años y 17.8 por ciento de personas adultas indicó haber fumado en el pasado.
Sobre los cigarrillos electrónicos, 91.7 por ciento de la población adolescente reportó nunca haber consumido estos productos (94.1 por ciento de las mujeres y 89.3 por ciento de los hombres). Dijeron haberlos usado 2.6 por ciento de adolescentes (500 mil) y 1.5 por ciento de personas adultas (1.3 millones).
Los especialistas destacaron que, en la adolescencia, el cigarrillo electrónico representa un grave riesgo para la salud individual porque se asocia con mayor intensidad de uso y adicción en la edad adulta.
El tabaquismo es el principal factor de riesgo prevenible de enfermedades crónicas como cardiopatía isquémica, enfermedad vascular cerebral, infecciones respiratorias y enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), cuatro de las principales causas de muerte en el mundo. Al consumo de tabaco se atribuyen ocho millones de decesos cada año.