“Lavadores” de papa y zanahorias se retiran del negocio para evitar ser víctimas de extorsión
Celaya. Gto. Feb. 22.- Mientras que los habitantes de la comunidad San Juan de la Vega, participan en las festividades del Santo Patrono, muchos trabajadores que limpian jícamas y zanahorias se quedaron sin empleo.
La razón de ello es porque los patrones o propietarios de esos cultivos tradicionales, que por años saturaban los mercados de Celaya, determinaron no seguir más en el negocio por las frecuentes extorsiones y amenazas de muerte por parte de de delincuentes que hay en la zona.
Varios de ellos, quienes pidieron el anonimato, dijeron que varias veces recibieron amenazas de extorsionadores, quienes les exigían fuertes cantidades para dejarlos trabajar, y que de no cumplir, les harían daño a su familia, su persona o negocio.
Uno de los denunciantes señaló que detuvo su “lavadora” de zanahorias y jícamas, al igual que otros agricultores con las mismas labores, porque recibieron amenazas de extorsionadores que les pedían fuertes cantidades de dinero.
“No vamos a trabajar solo para ellos”, señaló la persona, quien dijo también que piensa seriamente en irse “al norte” para obtener dinero para mantener a su familia.
Otras personas denunciaron que con el crecimiento de la “Villa” de San Juan de La Vega, fueron emprendedores y crearon tiendas de abarrotes, vinícolas y otras ramas, pero tuvieron que cerrar, pues los delincuentes comenzaron a pedirles fuertes cantidades de dinero.
Los denunciantes reconocieron que si hay vigilancia de policía, Guardia Nacional, Ejército y policía estatal, pero no se atreven a denunciar a los delincuentes por temor de que puedan hacerles daño a sus familiares o propiedades.
