Alejandro Navarro contempla comprar un predio en Marfil para oficinas propias de la presidencia municipal

Guanajuato, Gto., 12 de agosto de 2024.- Al exponer que para el próximo mes de octubre, cuando termine su administración, dejará un remanente en las arcas municipales, el alcalde, Alejandro Navarro Saldaña, anunció la posibilidad de que compre el predio e inmueble localizado en el kilómetro 1.5 de las carretera a Marfil.

Ese lugar es propiedad de la muy conocida familia Marcoquio, la cual tiene en él una constructora y otra parte se la renta al gobierno del municipio para el funcionamiento de varias dependencias.

“Me senté con la familia Marcoquio para hacerles un ofrecimiento de poder comprar el terreno, el inmueble. ‘Ahhh, ¿y tienes dinero para pagar los 40, 50, 60 millones de pesos?’. Seguramente al término de la administración contaremos con algunos remanentes importantes y que la familia o la empresa Azacan pudiera estar en posibilidad de venderle al gobierno municipal ese predio para que las futuras administraciones, sobre ese mismo predio ya pudieran construir su propio edificio municipal”.

Navarro Saldaña dijo que la familia le contestó que les diera un pazo de dos semanas para pensarlo y darle a conocer sí les interesa la propuesta

“Y en ese caso que se haga un avalúo por parte de ellos, otro avalúo por parte del gobierno municipal y si estamos en condiciones, pues poderlo adquirir y si no, pues hacer un plan de pago con la futura administración municipal, que yo no le veo ningún problema”.

La concentración de oficinas en ese inmueble ha permitido un mejor funcionamiento de las mismas y que sólo haya un pago de renta.

“Cuánto se paga ahí, pues no sé si pagan 250 mil o 300 mil pesos al mes, pero hay un ahorro considerable de lo que antes era en el tema de rentas. Además, no puede ser que Dolores Hidalgo, San Miguel de Allende, Purísima, San Pancho, todos tengan edificio propio y nosotros no tengamos un edificio municipal propio.

Tener oficinas municipales propias fuera del centro histórico fue uno de los tres proyectos emblemáticos que tenía en mente el alcalde, los otros dos la ciudadanía se los echó para abajo: un estacionamiento y un nuevo museo de las momias.