60 aniversario de la Estudiantina de la Universidad de Guanajuato 1963-2023
José Eduardo Vidaurri Aréchiga
Cronista municipal de Guanajuato
Las estudiantinas son agrupaciones musicales originarias de España como reflejo de la creatividad y la vocación artística de algunos jóvenes estudiantes que comenzaron a conformar este tipo de conjuntos que interpretaban alegres melodías con las que lograban obtener algún dinero para solventar sus gastos, era común también, en otras épocas que, a cambio de su actuación, se les ofreciera algo de comida y bebida.
Don Manuel Leal nos legó una interesante crónica sobre una estudiantina que se integró en 1881 en nuestra ciudad para dar curso a una iniciativa de la señorita Dolores Obregón González que se propuso fundar un orfanatorio, acción que requería de reunir algunos fondos para costear la obra, fue entonces cuando un español avecindado en nuestra ciudad, don Eulogio Mingo, organizó una tuna de unos 45 niños que fueron ataviados con trajes a la usanza de los siglos XVII y XVIII que fueron confeccionados por el maestro de sastrería don Miguel Domínguez con terciopelo importado color azul negro, con finas puntillas de encaje en las golas, bocamangas y remates de los pantalones cortos y complementados con chinelas de charol adornadas con hebillas de plata, y con sombrero de los que en tiempos goyescos llamaron de medio queso. Sobre los instrumentos nos dice que tenían guitarras, bandurrias, mandolinas, panderetas y castañuelas.
Esa simpática agrupación, refiere Crispín Espinoza en sus efemérides, debutó en el carnaval de 1881 y lo hizo de manera continua por espacio de 19 días. Lo recaudado sirvió para dar paso a la fundación de la “Casa Cuna de la Presa” que operó a finales del siglo XIX en nuestra ciudad.
Recordaba don Manuel Leal, una de las coplas que se cantaban en su casa y que fueron interpretadas por esa estudiantina infantil que recorrió el centro de la ciudad en 1881:
De Guanajuato a la presa
una niña se perdió;
la buscó la estudiantina
y en aquel balcón la halló
Aunque pobres, remendados,
sin más luz que la del sol,
no te pedimos dinero;
te pedimos, niña, amor.
A principios del siglo XX se organizó otra estudiantina en la que participó Emilio Molina. Existen también referencias de otra estudiantina que organizó entre 1924 y 1926 el profesor de música del Colegio del Estado Porfirio Pantoja. También se conformó una agrupación en 1961 por iniciativa de Mario Santibáñez y Eleuterio Alonso González, aunque de poca duración.
En el año de 1962 la actividad cultural de Guanajuato vivía un ambiente de efervescencia por lo que era común que grupos de estudiantes se reunieran para crear propuestas que tuvieran una sintonía con las características de la ciudad y su definida vocación cultural.
En Guanajuato todo comenzó, refirió Virgilio Fernández Wrenches, cuando un grupo de estudiantes en una amena tertulia, tropezaron con varios discos de música de estudiantinas españolas que les despertaron el entusiasmo por crear una institución similar en nuestra ciudad. Pronto se aprendieron las canciones y con el apoyo de las autoridades universitarias lograron conformar la agrupación. Otras referencias dicen que la tertulia fue organizada por Eugenio Trueba quien les pidió que escucharan un disco de la estudiantina de Barcelona.
La idea de Joaquín “El Flaco” Arias de organizar una agrupación similar fue secundada Jorge León Avella, Ignacio Hernández Ornelas, Lorenzo Galván Imperial, Rogelio León Barajas que comenzaron a prepararse pues ninguno tocaba algo o sabía cómo hacerlo. Pedro Luis Martínez asumió la dirección musical en ese primer tramo.
El grupo denominado Estudiantina de la Universidad de Guanajuato debutó el 13 de abril de 1963 ofreciendo una original audición en la plazuela de San Roque. La agrupación alcanzó una notable popularidad por haber impulsado las audiciones conocidas popularmente como callejoneadas, en las que iban recorriendo las calles, callejones y plazuelas de la ciudad tocando sus mandolinas bandurrias, violines, guitarras, bajo, pandero, acordeón llevado así una alegra nota que puso en alto el nombre de Guanajuato pues así nació la primera estudiantina del continente americano. Se desempeñaba cono rector de la Universidad de Guanajuato el Lic. Daniel Chowell.
El éxito de la agrupación fue tal que en enero de 1964 grabaron su primer disco en la Ciudad de México bajo el sello de la compañía francesa Belart, mismo que incluyó doce canciones, una de ellas compuesta por el también inquieto y bohemio Enrique Hagen. En ese disco se incluyeron también algunas melodías del siempre bien recordado profesor Isidro Carrillo compositor y director de la Banda del Estado.
Podemos recordar entre los fundadores al ya referido Joaquín “El Flaco” Arias, Marco Antonio Guerrero González, Pedro Luis Martínez Aguirre.
En 1965 la Estudiantina de la Universidad de Guanajuato grabó un documental junto con la primera actriz Silvia Pinal para la compañía Publicidad Ilarcy.
En 1967 la Estudiantina grababa su quinto disco para la firma Musart con melodías compuestas por Luis Felipe Rodriguez, Marco Antonio Guerrero y Virgilio Fernández que eran integrantes de la agrupación.
En 1968 la Estudiantina de la Universidad de Guanajuato participó activamente en los eventos programados para la Olimpiada Cultural.
En 1972 Leopoldo Hernández Quiroz, Rogelio León y Raymundo Valtierra directivos de la Estudiantina le entregaban al gobernador Manuel M. Moreno la producción discográfica de la agrupación.
En 1973 el Rector Cardona Arizmendi entregó un reconocimiento a los 25 integrantes de la Estudiantina de la Universidad de Guanajuato, la primera en América.
En 1975 la Estudiantina de la Universidad de Guanajuato deleitó a la Reina Isabel II de Inglaterra durante su visita a la ciudad de Guanajuato en una audición en las escalinatas de la Universidad. También partició la Rondalla Santa Fe.
La Estudiantina ha realizado giras por Estados Unidos, Canadá, Centro y Sudamérica. HA recibido reconocimeintos como el Disco de Oro por sus ventas. El Heraldo de Plata, dos Treboles de Oro, un premio al Mérito Turístico.
Su participación en Festival Internacional Cervantino se volvió tambén un referente de la participación universitaria.
Como refirió el propio Joaquín “El Flaco” Arias en el monográfico de su autoría Guanajuato Turístico publicado en 1988 en donde comenzó con unas coplas:
Despierta, niña, despierta,
despierta si estás dormida,
y asómate a la ventana,
que pasa la estudiantina.
Y la noche, refirió Joaquin Arias, despertó de sus sueños de poesía, alegría y juventud. Era el 13 de abril de 1963, en la ya inmortalizada Cervantina Plazuela de San Roque, se celebraban los 10 años de los Entremeses Cervantinos con un parto más del generoso Teatro Universitario de Guanajuato: el nacimiento de la Estudiantina.
Y entre requiebros de miradas y de callejón, visillos de ventana y derroches de claveles y de listón: nació la primera callejoneada.
Las calles están mojadas
y parece que llovió,
son lágrimas de una niña,
de una mujer que lloró.
Y así al son del pandero de la Estudiantina de la Universidad de Guanajuato, nacen miles de estudiantinas en México y en el continente entero.
Nuestro reconocimiento y felicitación a todos los que han formado parte de la Estudiantina de la Universidad de Guanajuato a lo largo de estos primeros 60 años de existencia. Larga vida a la estudiantina.