Hacia 1841 fue creada la primera agencia de viajes

Parte 3
* En la segunda mitad del siglo XIX ya había turismo por placer
* La aparición del coche democratizó el turismo
Los siglos XV y XVI fueron fructíferos en viajes y viajeros, Vasco de Gama, Magallanes y Colón, entre los más conocidos, abrieron nuevas rutas hacía África y América, al descubrimiento siguió la conquista, y durante las centurias siguientes se crearon los poderosos imperios coloniales Español y Portugués y se delinearon las vías navales transoceánicas, que siempre fueron peligrosas por el desarrollo de la piratería, el comercio, entonces fue Internacional y el Occidente pudo adquirir, aunque a precios caros, Té de la India y tabaco de América.
Los imperios coloniales de Francia e Inglaterra, son posteriores, florecen en Asia y África, mientras decae el español y el Portugués que alcanzan su plenitud en el siglo XIX, con la explotación despiadada del medio físico y del nombre aborigen, se crean las primeras plantaciones, se abren caminos, se trazan líneas de ferrocarril, se navega por los ríos y se capturan esclavos, hay viajeros para esa región, pero sólo con los funcionarios de las colonias y alguno que otro audaz explorador como Livingstone.
En Europa los viajeros por placer eran escasos, el transporte se hace por cultura, por negocios o política, ya que las carrozas, carros o diligencias transitan con mucha dificultad por los caminos llenos de polvo, lodo y expuestos constantemente a los asaltos. Las diligencias, llenaron una necesidad en su época y fueron fuente de inspiración para una literatura novelesca que floreció en la segunda mitad del siglo XIX, cuando los asaltos a las diligencias eran la noticia del día, tanto en Europa como en el Oeste de los Estados Unidos, en las ciudades la situación era diferente, el Lanau y el Cabriolet conducían a las bellas damas de sociedad, tripuladas por aurigas de levita con cuello y pechera almidonados.
La locomotora perfeccionada por Stephenson en 1830, permitió el establecimiento de los primeros trenes con relativa comodidad y seguridad en Inglaterra, Francia y Estados Unidos, y la máquina de vapor inventada por Papin, que fue luego aplicada a los barcos por Fulton y el propio Stephenson a su locomotora.
En 1841, Thomas Cook, carpintero británico y misionero bautista, organizó la primera excursión masiva por tren, de Leicester a Loughborough, de 570 pasajeros, con el fin de asistir a una reunión antialcohólica, durante la travesía de 16 kilómetros, los pasajeros fueron atendidos, con té, bollos recién horneados y música de banda, posteriormente realizó excursiones por tren y buque de vapor, creando así la primera Agencia de Viajes, la primera convención y las primeras comisiones.
Las agencias de viajes en Estados Unidos, remontan a sus orígenes, a St. Augustine, Florida, en la década de 1880, y al propietario de una tienda de regalos llamado Ward G. Foster, la geografía era su pasatiempo favorito, cuando algún forastero tenía dudas en cuanto a viajes invariablemente los vecinos los enviaba a que le preguntaran a al Sr. Foster, quién abrumado por las numerosas consultas, empezó a cobrar por las asesorías, llegó un momento en que el emprendedor erudito en geografía, vendía más planes de viajes que regalos, creando así una de las cadenas de agencias de viajes más grandes de Estados Unidos “Ask Mr. Foster”.
Ya en la segunda mitad del siglo XIX el ciudadano de cierta categoría económica podía hacer viajes por placer, y fue entonces que tomaron auge las exposiciones mundiales, como la de Paris, en 1889, en donde Eiffel construyó su espectacular torre, inaugurada el 31 de marzo del mismo año convirtiéndose en el símbolo de la ciudad Luz.
Al inicio del siglo XX, en sus primeros años, Francia fue el principal atractivo del turismo internacional, la “Belle Époque”, Toulouse Lautrec con sus famosos carteles del Moulin Rouge, Gauguin y Renoir con su pintura impresionista y Offenbach, con su alegre música de “Can Can”, permitió a Paris ejercer un atractivo muy poderoso para las grandes personalidades, artistas, diplomáticos, románticos y nuevos ricos.
Viena, dónde todavía sonaba el eco de los valses de Strauss, también acaparaba muchos visitantes, y otros viajeros, visitaban Nueva York, donde los rascacielos anunciaban la creación del nuevo imperio económico norteamericano, Detroit donde surgía la pujante industria automovilística o Hollywood en los aledaños de Los Ángeles, donde se filmaban las primeras escenas de movimiento de otra gran industria universal, la cinematografía.
La primera guerra mundial cambió el concepto de vida, cayeron tronos y regímenes, las naciones comprendieron la necesidad de tratarse y discutir sus problemas, de ahí nació la Liga de las Naciones inspirada por Wilson, el turismo empezó a surgir en mayor escala en forma organizada, en Europa donde ya existían muchas carreteras se organizaron los primeros ‟tours” con carros tirados por animales o bicicleta, ya que el automóvil se construía bajo pedido para personas pudientes.
La aparición del primer automóvil en serie, el Ford Modelo T a fines de la segunda década del siglo XX, influyó en la democratización del turismo, su venta a gran escala obligó a la construcción de carreteras en los Estados Unidos, Europa y otros países y dio origen al turismo familiar y de forma independiente sin estar sujeto a los itinerarios fijos de las agencias para las excursiones. Libertad que no sólo permitía mayor esparcimiento sino comodidades y facilidades para los niños.
Los viajes por mar tomaron gran incremento y comenzó la época de los grandes trasatlánticos para cruceros largos y transcontinentales.
La aviación desde los primeros ensayos de los hermanos Wright, en 1903, Alberto Santos Dumont en 1906 y de Louis Blériot en 1909, avanzó rápidamente hasta coronarse con el inolvidable vuelo de Charles Lindbergh, de Nueva York a Paris el 25 de mayo de 1927.
Aparecieron también los globos dirigibles de los cuales su exponente fue el “Gran Zeppelin” pero se demostró que no eran prácticos para vuelos aéreos y desaparecieron.
Las ciudades comenzaron a remozarse y a ofrecer atractivos, algunos países, adelantándose a un futuro prometedor, expidieron las primeras legislaciones sobre el ramo.
La incierta situación internacional, la ineficacia de la Liga de las Naciones, la guerra civil española y la amenaza al mundo con el fortalecimiento del nazismo, el fascismo y el comunismo, no permitieron que floreciera la naciente industria del turismo como se esperaba, la cual quedó paralizada totalmente con la segunda gran conflagración.